Derecho a la Propiedad

Probablemente el sentido de propiedad sea un pequeño gran defecto inherente al hombre, pero bueno o no, lo cierto es que desde el comienzo de la raza humana ha existido la propiedad personal: relacionada con armas, utensilios de la casa, etc.; con la tierra: límites en los territorios, más tarde las propiedades del señor feudal; y hasta con las creaciones artísticas, es decir, el derecho de autor, comúnmente llamado copyright, que tiene a la SGAE como su mayor mercenario.

En una sociedad en la que no se hace caso al desapego de la filosofía budista, el derecho de propiedad nos invade hasta el punto de crear propiedades en todos los aspectos de la vida. De esta manera nació el "EXLOVERIGHT".

Utilizando un nombre en idioma anglosajón que da más caché, el exloveright no es otro que el derecho hacia los antiguos novios o rolletes. Cuando has estado con una persona, aunque la relación se haya acabado, e incluso aunque fuera hace años, queda siempre un derecho de amante pretérito que viene a ser más o menos lo que comúnmente llamamos: Mear el territorio. Una vez que lo hiciste, es muy difícil deshacer ese círculo de pis. -perdón por lo escatológico-.

De esta manera, a pesar del paso del tiempo y llevándonos bien, peor, mucho peor... y hasta mejor con nuestro ex, e incluso habiéndolo dejado nosotros... nos joderá y mucho, verle con otra pareja. No nos encabronemos cuando nos pase, es así, ley de vida, el exloveright es una característica propia del ser humano, más desarrollado en unos individuos que en otros por supuesto, pero que siempre está ahí, creando esa sensación tan desagradable cuando le ves hablando con otra/o.

Pero es que al fin y al cabo, este derecho no viene dado por otra cosa que una mezcla de orgullo, vanidad -yo valgo más que la otra a leguas- y sentido de propiedad: lo que en su momento fue tuyo... no te gusta que lo puedan tener también otros, porque lo de que el que parte y reparte se lleva la mejor parte no son más que patochadas.